viernes, 22 de abril de 2011

CAPITULO IV “EN BUSCA DE UNA SOLUCIÓN”

No cabe duda de que la sociedad “nini”, es uno de los problemas actuales que más aquejan al Distrito Federal, pero que así mismo repercuten negativamente de forma más agravada en una población general, es por ello que se requiere se actué inmediatamente, y es que, si pretendemos no percibir el problema con el suficiente interés como hasta ahora ha sucedido, nuestra juventud se encontrará inmersa en un sinfín de conflictos irremediables.
Este es una situación que engloba a toda una sociedad, por lo que para remediarlo es debido que los mismos nos involucremos en ello.
Tanto la familia, el gobierno y cada uno de nosotros tenemos la responsabilidad de acceder a ciertos regímenes, sin embargo, la de mayor peso recae directamente en todos aquellos adolescentes que pese a encontrarse en una situación de total apatía y mediocridad se rehúsan duramente a generar un cambio en sus vidas.
En la actualidad el gobierno mexicano ha sugerido una serie de programas con el objetivo de erradicar esta población, sin embargo, es indignante enterarnos de que simplemente se han quedado en planes y que no se han llevado a cabo, por lo que miles de chicos aún continúan con esta situación de frustración forzada.
Existen diversas soluciones que se le pueden proporcionar a este conflicto, pero es decisión de los propios jóvenes aprobarlas y unirse a estas, sólo que, es precisamente este aspecto el que la adolescencia de la Ciudad de México no considera necesario por retomar.
Como lo mencione antes, es obligatorio  que el entorno de los chicos adopte posturas de cambio en tanto a la sociedad “nini”, ya que, en casa se le deben de remarcar estrictamente los límites, así como las obligaciones. Hablando en la cuestión escolar es infalible que los chicos sean orientados correctamente en tanto a  las mejores aptitudes que tengan y que puedan implementar en su futuro.
Desde luego que sería fatal excluir al gobierno de este suceso, pues, son ellos principalmente quienes tienen la responsabilidad de generar empleos para esta comunidad inactiva que incrementa día a adía, punto que en la política no representa relevancia, por lo contrario, ni se observa, evitando así inmiscuirse en problemas con la sociedad.
Es por esto, que se requiere fabricar soluciones inmediatamente, que remedien de manera total este hecho, será algo sumamente complejo, pero no imposible.
A continuación el equipo propone algunas opciones de ayuda ante la situación grave de jóvenes “nini” por la que en la actualidad atraviesa el Distrito Federal

4.1. Creación de empleos para jóvenes
Las generaciones “nini” al estar integrada por jóvenes que ni estudian ni trabajan, requieren principalmente ya sea de una escuela o bien de un empleo, estos harán que poco a poco la juventud se vaya interesando en su futuro, observándolo con unas perspectivas totalmente diferentes a las que se tenían antes de ello.
Sin embargo, y por desgracia, los mexicanos habitamos actualmente una ciudad (Distrito Federal), en la que no se brindan a nuestros adolescentes ciertas oportunidades de trabajo, y es que, la mayoría de las grandes empresas prefieren gente con experiencia, a tener que enseñar a personas inmaduras que comienzan con su carrera laboral.
Además cuando los enormes capitalistas se encuentran con un sector de la población necesitada y desesperada por obtener un empleo, se les facilita someterlos a una explotación completamente injusta, en la que, las horas de trabajo son excesivas y la paga mínima. Esto únicamente origina que los chicos se decepcionen y opten por conservar la vida inactiva y cómoda que llevaban hasta ese entonces.
Claro que al mencionar esto no estoy justificando a todos esos chicos que se suman diariamente a la población “nini”, por lo contrario, ya que, considero que la responsabilidad de cambiar ese tipo de vida radica principalmente en ellos, y en sus deseos de emplearse en alguna actividad.
Por supuesto que sí le atribuyo cierta culpa al gobierno que hasta ahora no ha  podido solucionar por lo menos en cierta parte este conflicto, púes, al parecer el problema empeora día  a día, y eso es fácilmente observable cuando nos detenemos analizar las cifras de “nini” que actualmente existen en la Ciudad de México, y que al parecer incrementan de manera importante diariamente.
Rendón Ortíz Areli
El comentario anterior se realiza por que es lamentable observar que en hoy en día la sociedad juvenil se encuentra en un estado en el que se observan “tan preparados y satisfechos con sus vidas, y tan vulnerables y perdidos, nuestros jóvenes se sienten presa fácil de la devastación laboral, pero no aciertan a vislumbrar una salida airosa, ni a combatir este estado de cosas”[1], para mejorar sus situación de vida.
En cuestiones políticas, este aspecto se ha retomado en varias ocasiones con el único propósito de crear un modelo económico que permita cumplirlo, pero, es claro que al ser México un país tercermundista, simple y sencillamente no se realizará hasta que el país cambie de raíz y se tenga otra idea acerca de las soluciones que la nación requiere.
Desde luego este no es un punto que apruebe a nuestro gobierno, no, es responsabilidad de este que dichos cambios se logran, sin embargo, es inaudible enterarse de que en lugar de crear empleos y demás, los precios de nuestra canasta básica aumentan a diario y sin ningún tipo de explicación, y es más indignante no saber en qué se agota el dinero pagado por ello, si no se contempla ningún tipo de mejora en el país.
Es básico que los jóvenes se interesen por cambiar su situación de apatía, ya que, pienso y reafirmo, debe existir una mentalidad en la que no se crea simplemente que no hay empleo seguro y, cuando existe, es bajo contratos efímeros, de unos cuantos meses, para no generar ninguna responsabilidad social por parte de los empresarios”[2], y en la que además  no se vea simplemente por el presente, sino que, se anhele un futuro de prosperidad, ideología que la generación “nini” no retoma, obstaculizando duramente la creación de un mejor México.
Consideramos que en el ámbito político se debe dar una reforma donde los empleos para adolescentes sean de mejor calidad, y en los que exista un interés por el hacho de que estos culminen una carrera profesional, de manera que los horarios sean más cómodos, así como los salarios, sin  embargo, es cuestión de cada “nini” hallarlos, involucrando directamente que se deje a un lado su apatía y conformismo.



4.2. Orientación vocacional temprana en escuelas
Este es uno de los motivos menores por el que los jóvenes desertan de las escuelas, claro que no por esto debe tener una importancia inferior, al contrario, se debe estar concientizados sobre la relevancia que conlleva el hecho de tener personas expertas que se dediquen a orientar a la juventud en cada institución en la que estos se desenvuelvan.
En México no es común hallar en las escuelas especialistas dedicados específicamente a ayudar a los jóvenes en tanto a la elección de las carreras que deseen estudiar, por lo contrario, nos topamos con maestros sin ética que se dedican a menospreciar a algunos alumnos, mencionando continuamente las pocas capacidades, que según ellos, tienen.
Es por esto que nuestros jóvenes se ven envueltos en una serie de confusiones donde se cuestionan las actividades para las que serán aptos, situación que en muchas ocasiones significa una mala decisión a la hora de seleccionar la profesión cursada, o en los peores casos la deserción escolar.
Pienso que en este aspecto la responsabilidad recae principalmente en las diferentes instituciones académicas que no prestan atención a este aspecto, o que también llegan a negarse en cuanto a la implantación del mismo, sin embargo, igualmente es considero compromiso de los adolescentes el tener un acercamiento oportuno con sus maestros e incluso áreas especializadas en ello, donde se exija una prueba o charla de apoyo.
Creo también, que al igual que en todo, el gobierno debería instalar el requerimiento obligatorio de que en las escuelas existiesen profesionales encargados de brindar ayuda a los chicos apunto de egresar del nivel medio superior, con el fin de orientarlos de buena forma  a cerca de las mejores aptitudes con las que cuentan y que podrían aplicar mejor en el aspecto laboral.
Rendón Ortíz Areli
En el Distrito Federal este no es un punto relevante, por lo que, hasta ahora las escuelas que cuentan con este servicio son escasas, y no se percibe la más mínima intención de cambio.


 4.3. Interés de los padres por el desarrollo de sus hijos
Los padres juegan un papel sumamente importante en la vida de cualquier persona, sobre todo en la etapa adolescente, que es cuando la relación padre e hijo influye arduamente en el futuro de muchos jóvenes.
En el caso “nini” la mayoría de los padres tienen jornadas laborales extensas, en las que les resulta imposible estar cerca de sus hijos o tener una buena comunicación con ellos, además de que se les dificulta vivir al tanto de las actividades que estos realizan.
Y es que, para la mayoría de los adolescentes es imprescindible que los padres muestren cierto interés por ellos, sin necesidad de pedirlo, sólo que, como ya lo dije, la situación de la familia lo impide, ya que, en gran parte de las casas mexicanas son 3 o 4 personas las que dependen de una sola.
La situación que en la actualidad atraviesa el Distrito Federal no permite que las cabezas de los hogares puedan trabajar menos horas y estar en continuo contacto con sus hijos, púes en la mayor parte de los casos es mejor que estos se encuentran sanos física a mentalmente.
Los padres llevan consigo determinada culpa de tener en sus hogares a un chico “nini”, púes, si es responsabilidad de ellos mantenerlos y permitir que estos conserven una vida de ocio total, simplemente porque se piensa que esa es la mejor manera de demostrarles cariño y de evitar que estos sufran algún daño.
Es precisamente por esto que resulta totalmente relevante concientizar a los adolescentes sobre las obligaciones que se deben cumplir, pero así mismo delimitar el apoyo económico que se les brinda, evitando de esta forma que los chicos se consideren por sí mismos como unos jóvenes desocupados que buscan acomodo, que tratan de encontrar un lugar en la sociedad, que luchan para conseguirlo pero, sencillamente, no lo logran”[3].
Por supuesto que resulta sumamente importante estar al tanto de que son también los chicos quienes llevan la gran responsabilidad de sumarse en las inmensas filas de la población “nini”, esto al dejarse influenciar por amistades negativas o por sus ideales propios e integrarse a ella.
Es por ello que para que los “nini” se disminuyan poco a poco es necesario que tanto los padres como los mismos jóvenes den una giro a sus vidas en el que exista esa comunicación y disposición por un cambio, en muchos de los casos deben ser personas profesionales (psicólogos) quienes también intervengan, púes será un proceso complejo en el que se requiera ayuda externa.
Dejemos a un lado ese concepto en el que se cree que lo material soluciona todo, o que nuestro hijos necesitan una sobreprotección obsesiva para que no les ocurra nada, mejor, eduquémoslos de tal forma que ellos sepan decidir por sí solos que será lo negativo o positivo para sus vidas, sin necesidad de reiterárselos a cada momento y hostigarlos constantemente con  las preguntas habituales sobre lo que piensan hacer de sus vidas.

4.4. Cambio en las mentalidades conformistas de la población juvenil
Es lamentable enterarse de que es por este motivo principalmente que el cambio en las generaciones “nini” no se ha podido conseguir, y es que, es bien sabido que esta población se encuentra integrada en su mayoría por adolescentes que observan la vida de manera cómoda, en la que viven a expensas del apoyo económico otorgado por sus padres, que pese a notar la apatía en sus hijos permiten que estos continúen manteniéndola así.
Pensamos que este hecho se logrará erradicar en el momento en que nuestra juventud deje a un lado ese pensamiento conformista que simplemente facilita la sobreexplotación laboral y el subdesarrollo en México, esto lo digo porque las circunstancias en las que la ideología “nini” está planteada facilita totalmente al gobierno la capacidad de continuar con  el sinfín de negocios turbios que hasta hoy en día han logrado mantener sin ningún problema.
En este aspecto la principal responsabilidad recae en el mismo chico, ya que es su compromiso tener la intención de cambiar en cierta parte esta situación, no obstante los padres igualmente representan un detalle de suma importancia, ya que ellos deben ser los encargados de dirigir sus ideales, de tal forma que los adolescentes se sientan resguardados y seguros de que lo que están haciendo es lo mejor para ellos.
También es entendible hasta cierto punto que hoy las razones de estos jóvenes abarquen una ideología en la que cualquier proyecto representa un motivo de menosprecio, puesto que, la mayor parte se cuestiona “¿Dónde está  el sueño que nos vendieron hace varias décadas, esa ilusión que nos repitieron durante años de que si lograbas tener educación superior, entonces podrías conseguir trabajo seguro y bien remunerado, ascender en la clase social y económica, tener casa, auto y dinero. Es decir, la vida resuelta?”[4].
Probablemente todos los mexicanos nos hagamos la misma pregunta, y nadie no la responda, y es que, desafortunadamente esa es la realidad que hoy en día predomina a todo un país, una realidad cruel, en la que estamos consientes de que ningún empleo actualmente cubre los requerimientos básicos, pero que sin embargo debes cumplir si pretendes sobrevivir.
Es por ello que la población “nini” se excusa de esta situación y pretenden ser comprendidos, pese a que sus justificaciones sean completamente ilógicas, ellos simplemente se rehúsan a admitirlo y continúan con su vida en el confort familiar.
Entonces, es debido que cada padre en casa concientice a los adolescentes sobre las obligaciones académicas y domésticas que cada uno debe cumplir, con el único propósito de que los jóvenes se encuentren al tanto de los problemas que ocasionaría que ellos desertasen a nivel escolar y quisieran vivir plácidamente en casa sin compromiso alguno.
Es aquí cuando el apoyo económico juega un rol de suma importancia, puesto que es necesario que en cada hogar exista cierto límite económico, en el cual el dinero brindado a cada joven sea acorde con los gastos que cada uno de ellos tenga, es decir, no debe haber una sobreprotección económica, en la que se den cantidades excesivas de capital a los chicos, imaginando que así no les faltará nada.


v  Conclusión
Concluyendo, se considera que la solución va de la mano tanto con el gobierno como con la sociedad, sin embargo, son principalmente los chicos “nini” quienes llevan consigo la mayor responsabilidad de lograr un cambio ante esto, ya que, son ellos principalmente quienes deben estar en la disposición de intentar dar un giro en sus vidas.
No obstante es primordial que la familia de estos adolescentes muestren continuo interés por las actividades que desarrollan sus hijos, esto, con el objetivo de que los chicos se sientan resguardados acerca de los que realizan, además de que es importante que si en cualquier momento se detectan anomalías, la familia se encuentre a tiempo de poder corregirlas.
En tanto al trabajo que ha realizado el gobierno para erradicar dicha problemática, podemos decir de manera literal que es completamente insuficiente, que no se han sabido o querido implementar los programas que se han planeado, y que quizá tarden mucho más (de lo que hasta ahora) en realizarse.
Es precisamente por esto que es compromiso de cada “nini” ver por un cambio, sin pretender que los demás solucionen sus vidas, persiguiendo un trabajo o una idea de superación, en la que se vislumbren por sí mismos un futuro mejor.
En medida en que la sociedad juvenil se encuentre en disposición de una mejora, se notará de forma inmediata un cambio para todos nosotros, tanto cultural como socialmente.












[1] Barberia Jose Luis, ibídem.
[2] Olmos Jose Luis, Los ninis mexicanos
[3] Olmos José Luis, ídem,

[4] Ibídem.

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